Impactos de la crisis sanitaria en la cotidianidad educativa será tema de encuentro de estudiantes de América Latina y el Caribe

7 de agosto de 2020

Una semana después del evento de apertura de los “Encuentros Latinoamericanos Estudiantiles – Juventud, Educación y Pandemia”, realizado el jueves 6 de agosto y que lanzó la sistematización de la campaña “#LaEducaciónQueNecesitamos para el Mundo que Queremos”, jóvenes y adolescentes de América Latina y el Caribe se reunirán nuevamente el 12 de agosto, Día Internacional de la Juventud, para darle seguimiento a los debates y reflexiones sobre los impactos de la crisis sanitaria en la cotidianidad educativa. El evento será transmitido a las 14.00 (GMT-3) a través de las páginas de Facebook y Youtube de la Campaña Latinoamericana por el Derecho a la Educación (CLADE). 

En este primer encuentro, participarán del encuentro las y los estudiantes: 

La moderación se quedará a cargo de Angelica Hidalit Pedraza Villegas, de CADEM, Jazmin Elena, de MELAC y RESALDE, y Eduardo Torres, de CADE.


Ciclo de encuentros

El ciclo de encuentros reúne estudiantes de América Latina y del Caribe para tratar temas vinculados al derecho a la educación. La iniciativa es de la CLADE y siete foros que componen su membresía: la CADE, la CBDE, el Foro por el Derecho a la Educación Pública de Chile, la CCDE, la RESALDE, la CADEM y la CPDE, además del MELAC.

La apertura de los encuentros se realizó el 6 de agosto y contó con la participación de Nelzy Lizarazo, coordinadora de la CLADE, que presentó la sistematización de la campaña “#LaEducaciónQueNecesitamos para el Mundo que Queremos”, iniciativa desarrollada por la CLADE con el apoyo de la Oficina Regional de UNICEF para América Latina y el Caribe, y que buscó incentivar a que adolescentes y jóvenes de América Latina y el Caribe compartieran sus voces, expectativas y opiniones sobre el derecho a la educación. 

A continuación, mira la grabación del evento:

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Joven peruana vestida con una camisa rosa de manga larga y un sombrero, sosteniendo un maíz pequeño. En la parte posterior de la imagen, hay montañas y un cielo azul.
Foto: PxHere

Perú: ¿Qué medidas deben tomar los gobiernos para asegurar el derecho a la educación y al cuidado en la primera infancia?

Articular esfuerzos para garantizar la participación y opinión de niñas, niños y adolescentes; promover el cierre de brechas y las condiciones para el acceso a la educación a distancia y desarrollar las estrategias pedagógicas de educación inicial, considerando las características culturales, lingüísticas y socioeconómicas de cada región del país. Esas fueron las recomendaciones que organizaciones y redes de educación en Perú, entre ellas la Campaña Peruana por el Derecho a la Educación, a través del Colectivo Interinstitucional por los Derechos de la Niñez y Adolescencia, hicieron al gobierno nacional y a los gobiernos regionales y locales del país para la superación de las limitaciones y dificultades impuestas por la pandemia al desarrollo de la educación de niños y niñas. 

Las recomendaciones elaboradas a partir de las conclusiones de ocho sesiones en línea con organizaciones e instituciones gubernamentales, como el Ministerio de Educación de Perú (MINEDU) y la Red de Municipalidades Urbanas y Rurales del Perú (REMURPE), están reunidas en el documento “Recomendaciones para la protección del Derecho a la Educación”.

“El derecho a la educación de las niñas, niños y adolescentes enfrenta nuevos retos en el contexto del COVID-19, debido a las restricciones de interrelación y movilización que plantea la pandemia, pues ha obligado a los países a suspender las clases presenciales y a optar por una educación a distancia en emergencia, haciendo uso de internet, radio y televisión para llegar a sus estudiantes. En el Perú, a estas dificultades se suman las brechas de acceso y cobertura educativa que aún prevalecen y que tienen que ser consideradas al momento de implementar estrategias para la educación a distancia, la educación comunitaria y toda medida en respuesta a la emergencia”, afirma el Colectivo en la publicación.

>>  “Recomendaciones para la protección del Derecho a la Educación”.


Estudiantes de América Latina y el Caribe discuten sobre juventud, educación y pandemia

29 de julio de 2020

Para reflexionar sobre los impactos de la crisis sanitaria en la cotidianidad educativa y expresar sus opiniones acerca de cómo garantizar el derecho a la educación en América Latina y el Caribe, las y los jóvenes de la región se reunieron para apertura de los  “Encuentros Latinoamericanos Estudiantiles – Juventud, Educación y Pandemia” previstos para este semestre. 

Para abrir este ciclo de encuentros se difundió la sistematización de la campaña #LaEducaciónQueNecesitamos para el mundo que queremos. La iniciativa de la CLADE y con el apoyo de la Oficina Regional de UNICEF para América Latina y el Caribe, la campaña se desarrolló en el segundo semestre de 2019, en el marco del aniversario de 30 años de la Convención sobre los Derechos del Niño de la ONU, y buscó incentivar a que adolescentes y jóvenes de América Latina y el Caribe compartieran sus voces, expectativas y opiniones sobre el derecho a la educación. 

Encuentro – 6 de agosto de 2020

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Encuentro – 12 de agosto de 2020

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Encuentro – 12 de septiembre de 2020


Encuentro – 13 de octubre de 2020


Ciclo de encuentros

El ciclo de encuentros iniciará con tres eventos los días 12 de los meses de agosto, septiembre y octubre de este año reuniendo estudiantes de América Latina y del Caribe para tratar temas vinculados al derecho a la educación. La iniciativa es de la CLADE y siete foros que componen su membresía: la Campaña Argentina por el Derecho a la Educación (CADE), la Campaña Boliviana por el Derecho a la Educación (CBDE), el Foro por el Derecho a la Educación Pública de Chile, la Coalición Colombiana por el Derecho a la Educación (CCDE), la Red Salvadoreña por el Derecho a la Educación (RESALDE), la CADEM y la Campaña Peruana por el Derecho a la Educación (CPDE), además del Movimiento Estudiantil de Latinoamérica y el Caribe (MELAC).


Foto: Adam Jones

¿Cómo garantizar la EPJA en tiempos de pandemia?

28 de julio de 2020

¿Qué se está haciendo para garantizar la Educación de Personas Jóvenes y Adultas (EPJA) en América Latina y el Caribe? ¿Qué pueden hacer las y los educadores? Buscando contestar esa y otras interrogantes sobre el derecho a la educación a lo largo de la vida en la región, especialmente en el contexto de pandemia por el Covid-19, el Consejo de Educación Popular de América Latina y el Caribe (CEAAL) y el Grupo de Incidencia en Políticas Educativas (GIPE), que forma parte del Consejo de Educación Popular de América Latina y el Caribe (CEAAL), lanzaron la publicación “La Educación de Personas Jóvenes y Adultas (EPJA) en América Latina y el Caribe durante la pandemia por la Covid-19″. 

Las medidas de aislamiento evidencian las asimetrías existentes y las profundizan, y suponen un retroceso educativo que tiende a profundizar las desigualdades, principalmente por las condiciones económicas y sociales de la gran mayoría de la población”

Con cinco capítulos divididos en 15 páginas, la publicación analiza el escenario actual del derecho a la educación de personas jóvenes y adultas en la región, además de subrayar algunos desafíos para garantizarlo, como la importancia de desarrollar políticas de democratización de la conectividad, especialmente para zonas urbanas marginales, rurales, amazónicas; y para personas afrodescendientes. Asimismo, subraya la necesidad de fortalecer el trabajo territorial ligado a la educación comunitaria que responda a las necesidades y demandas de las organizaciones y personas para construir una sociedad educadora, compartiendo saberes, el autocuidado, estrechando lazos de solidaridad y fortaleciendo los valores ciudadanos.

“En el mundo entero y en América Latina y el Caribe, estamos viviendo las consecuencias de una crisis que se inicia como sanitaria, ocasionada por el Covid-19, y que hoy tiene graves consecuencias en lo económico, educacional, ambiental, en el cuidado de la vida y de la naturaleza. (…) Las medidas de aislamiento evidencian las asimetrías existentes y las profundizan, y suponen un retroceso educativo que tiende a profundizar las desigualdades, principalmente por las condiciones económicas y sociales de la gran mayoría de la población”, afirma la publicación.

Según el documento, la educación de personas jóvenes, adultas y adultas mayores está caracterizada no solo por la edad de aquellos que están por fuera del sistema educativo, sino también por su condición social. “En otras palabras, son aquellos y aquellas que el sistema ya ha excluido. Son aquellos y aquellas a los y las que hoy el sistema vuelve a golpear en esta situación de aislamiento. Esta población se encuentra en situación de vulnerabilidad en todos sus sentidos”.

La publicación también presenta una muestra de lo que siete países de la región están haciendo, a partir de informes de países recopilados por miembros del GIPE-CEAAL. A continuación se presenta un resumen de cada uno de ellos. 

Argentina 

En lo que hace a política educativa, poco se habla de la situación de jóvenes y adultos en esta emergencia educativa. Las propuestas oficiales por parte del Estado no contemplan la particularidad del trabajo con este sector de la población. En cambio, apuntan a cierta democratización del acceso a la educación, a través de la elaboración de cuadernillos para educación primaria y secundaria (con el fin de que lleguen a los territorios más remotos de la geografía local) y a la generación de contenidos audiovisuales o radiales, que se presentan como sustitutos de los y las docentes: las clases continúan; el Ministerio de Educación educa a través de estos dispositivos.


Brasil 

La gran mayoría de los departamentos de educación, estatales y municipales, suspendió las actividades en el aula a fines de marzo. Recién el 28 de abril el Consejo Nacional de Educación (CNE) aprobó por unanimidad las directrices para guiar a las escuelas de educación básica y las instituciones de educación superior durante la pandemia de coronavirus. Durante este intervalo de un mes, los estados y municipios trataron de crear sus propias estrategias para la enseñanza y la asistencia alimentaria. En términos de estrategias pedagógicas, es posible identificar tres: las que usan Google Classroom, las aplicaciones desarrolladas específicamente para esta misión, las clases de video u otras plataformas de la propia secretaría, las que usan canales de TV abiertos para transmitir clases, y la preparación de material impreso y folletos que los estudiantes pueden recibir en casa o recoger en la escuela.


Chile 

En todo el sistema educacional chileno se ha enfrentado la emergencia sanitaria y su impacto en la vida escolar a través de la educación a distancia, con todas las limitaciones que ello tiene en materia de capacitación de los y las docentes. Además, la educación en línea es un recurso de emergencia en la actualidad pero no puede ser sólo una réplica de la educación presencial, como tampoco simular en las casas las actividades y los procedimientos de estudio y evaluación que son propios de la vida escolar regular. Directivos, docentes y equipos psicosociales de los establecimientos de la EPJA han debido asumir el desafío de enfrentar el cierre escolar con acciones de educación a distancia a través del uso de plataformas de tecnologías de comunicación remota (como Zoom y Whatsapp), preparación de guías de aprendizaje, entrega domiciliaria de estas guías donde no se tiene conexión a internet o no existen condiciones para la concentración y el estudio, al mismo tiempo que se procuraban ayudas alimentarias y apoyo psicosocial a los y las estudiantes que lo necesitaban.


El Salvador 

Se mantienen programas de alfabetización, educación básica y alfabetización para jóvenes y adultos, particularmente programas de modalidades flexibles como segunda oportunidad para quienes abandonaron el sistema y no lograron una educación oportuna. Estas modalidades han sufrido recortes presupuestarios y de cobertura en los últimos años. Se pasó de una inversión de $ 9,5 millones en 2019 a $ 8,1 millones en 2020 (este monto incluye los recursos asignados a través de instituciones implementadoras y los administrados desde las direcciones departamentales de Educación).


Guatemala

Guatemala mantiene enormes rezagos educativos a todo nivel. La cobertura del subsistema escolarizado es baja (80% en el nivel primario) y en algunos casos extremadamente baja (cercana al 50% en el primer ciclo de la secundaria y cerca del 25% en el segundo ciclo), mantiene una tasa de alfabetización absoluta del 20% según datos oficiales (2018) y tradicionalmente la EPJA ha sido mínima frente a la educación escolarizada. El sistema educativo en su conjunto se ha orientado hacia los procesos virtuales, lo que solo permite un alcance parcial, dada la baja cobertura de internet. Hasta ahora las principales acciones son: entrega de alimentos (alimentación escolar) a las familias de los estudiantes del nivel primario y, desde mayo, distribución de guías educativas impresas para todos los grados del nivel primario (para dos semanas, con baja calidad).


Nicaragua 

No ha interrumpido oficialmente las actividades educativas. Según el Ministerio de Educación se ha instado a los centros educativos a tomar medidas como el lavado de manos al menos dos veces al día y mantener distanciamiento de no menos de un metro con los estudiantes. No hay información específica sobre la Educación de Jóvenes y Adultos, y se continúan desarrollando como en tiempos normales las diversas modalidades de educación presencial y a distancia.


Perú 

El Ministerio de Educación (MINEDU) ha implementado una estrategia de enseñanza a distancia denominada “Aprendo en casa” que, según datos oficiales, está llegando a más de seis millones de estudiantes de colegios públicos de la Educación Básica Regular, Básica Alternativa y Especial, a través de diversos medios como internet, radio y televisión. Según un informe del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, en el Perú solo el 46% de peruanos tiene acceso a Internet; la penetración de Internet es casi inexistente en las zonas rurales (1%), mientras que en las zonas urbanas es del 30,2%.


República Dominicana

A partir de la declaratoria del Estado de Emergencia Nacional, el 19 de marzo de 2020, y la suspensión de la docencia presencial, el Ministerio de Educación de la República Dominicana (MINERD) marcó la necesidad de diseñar e implementar estrategias y actividades para dar continuidad al aprendizaje desde casa, utilizando diversos recursos y herramientas virtuales disponibles para esos fines, y otras como medio de comunicación e información. La respuesta educativa ha integrado la televisión, la radio, las plataformas diversas, las herramientas y los recursos virtuales múltiples. En general, ha dado respuestas a casi tres millones de estudiantes a nivel nacional. En EPJA, se ha atendido alrededor de 300 mil estudiantes, sin contabilizar los de alfabetización, en mil centros y con alrededor de diez mil docentes. 


>> “La Educación de Personas Jóvenes y Adultas (EPJA) en América Latina y el Caribe durante la pandemia por la Covid 19″


Foto: Carolina Valenzuela

Relatora de la ONU: ninguna medida temporal responderá al fracaso en la construcción de sistemas educativos fuertes

27 de julio de 2020

“El fracaso anterior en la construcción de sistemas educativos fuertes y resistentes y en la lucha contra las desigualdades arraigadas ha abierto la puerta a un impacto dramático en los y las más vulnerables y marginados/as, a lo que ninguna medida temporal adoptada a toda prisa podría haber respondido completamente”, afirma la relatora especial sobre el Derecho a la Educación de la ONU, Koumbou Boly Barry, en su informe “Right to education: impact of the COVID-19 crisis on the right to education; concerns, challenges and opportunities” (Impacto de la crisis de COVID-19 en el derecho a la educación; preocupaciones, desafíos y oportunidades). 

En este informe, la relatora especial analiza los temas que considera más urgentes desde una perspectiva de derechos humanos. “Actuar dentro de un marco de derechos humanos es crucial para garantizar que las medidas adoptadas en respuesta a la pandemia no pongan en peligro el derecho a la educación y no aumenten el sufrimiento de los y las más marginados/as”, afirma.

Boly Barry también presenta en su informe una serie de recomendaciones para mitigar los impactos de la pandemia en la educación. En particular, se debe realizar una evaluación exhaustiva para determinar, en cada contexto local, la dinámica que condujo a una mayor discriminación en el disfrute del derecho a la educación durante la crisis. Se debe incluir un análisis de las crecientes desigualdades debido a las medidas adoptadas para enfrentar la pandemia; una investigación sobre la sostenibilidad de los modelos económicos y financieros detrás de los sistemas educativos, incluida la consecuencia del escaso financiamiento de las instituciones educativas públicas; un análisis del papel de los actores privados en la educación; una evaluación de la adecuación de la protección social brindada a los y las trabajadores/as de la educación, incluso en el sector privado; y una revisión de la falta de cooperación entre las administraciones de los Estados, las instituciones educativas, los y las docentes, los y las estudiantes, los padres, las madres y las comunidades.

Además, la relatora subraya que el despliegue de la enseñanza a distancia en línea (junto con la radio y la televisión) solo debe considerarse una solución temporal destinada a abordar una crisis. “La digitalización de la educación nunca debería reemplazar la escolarización en el lugar de trabajo con los y las docentes, y la llegada masiva de actores privados a través de la tecnología digital debería considerarse como un peligro importante para los sistemas educativos y el derecho a la educación para todos y todas a largo plazo”, afirma. Para Boly Barry, es necesario que se realice un debate exhaustivo sobre el lugar que se debe dar al aprendizaje en el futuro, teniendo en cuenta no solo las posibles oportunidades sino también el efecto nocivo que las pantallas tienen sobre los niños, las niñas y los jóvenes, incluido su derecho a la salud y la educación.

Mira la grabación de la presentación de Boly Barry en la sesión de la ONU sobre el informe, con subtítulos en portugués: 

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>> Informe “Right to education: impact of the COVID-19 crisis on the right to education; concerns, challenges and opportunities”

 


La imagen es una ilustración sobre un fondo blanco con unos detalles naranjas entres esquinas; solo la esquina superior derecha es blanca. En la parte de encima, está el título de la campaña, en color blanco sobre un fondo fucsia, que dice: “Derechos desde el principio”. Al lado izquierdo del título, está la ilustración de un niño indígena con taparrabos de color azul y fucsia con una guacamaya azul en su brazo. Encima del título, está la ilustración de un niño rubio haciendo una media luna; él lleva una bermuda en tonos verdes y naranjas y está sin camiseta. Debajo del título está el texto de color blanco sobre una franja de color naranja: “La educación y el cuidado en la primera infancia en América Latina y el Caribe ante tiempos de pandemia”. Al lado izquierdo del texto está la ilustración de un niño de la cintura para arriba. Él está sonriendo y tiene una gorra en la cabeza de color rojo, lleva una camiseta verde sin mangas y está escribiendo en un cuaderno blanco con azul. Debajo de este texto, al lado derecho, está la ilustración de una niña y un niño sentados a una mesa con platos de comida. La niña lleva coletas y tiene cabello de color verde, usa una camiseta roja y tiene una cuchara verde en su mano izquierda. A su lado derecho, está un niño negro con la cabeza rapada; él sonríe y tiene una cuchara roja en la mano izquierda.

Diálogo virtual aborda la educación y el cuidado en la primera infancia ante tiempos de pandemia

28 de mayo de 2020

Con el propósito de impulsar diálogos y reflexiones sobre las actuales oportunidades y los desafíos para la realización de la educación y del cuidado en la primera infancia como un derecho humano, la CLADE, en alianza con la OMEP América Latina y EDUCO, realizó el  diálogo virtual “La educación y el cuidado en la primera infancia en América Latina y el Caribe ante tiempos de pandemia”. El evento tuvo lugar este jueves, 28 de mayo, de 15:00 a 16:30 (GMT-3), y se transmitió a través de los canales de la CLADE en Facebook y Youtube

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En el encuentro, se abordó hallazgos del estudio “El derecho a la educación y al cuidado en la primera infancia: perspectivas desde América Latina y el Caribe”, elaborado por CLADE y OMEP, con el apoyo de EDUCO, y también los retos que nos impone la actual crisis sanitaria por la pandemia COVID-19. Participaron: Alexandra Inmaculada Santelises Joaquín, Directora de Educación Inicial del Ministerio de Educación de República Dominicana; Cristina Lustemberg, Diputada de Uruguay; Constanza Alarcón, Viceministra de Educación de Colombia; Luis Pedernera, presidente del Comité sobre los Derechos del Niño de la ONU y Mercedes Mayol Lassalle, presidenta mundial de OMEP. Mikel Egibar, de EDUCO, se hizo cargo de la moderación. 

 


El derecho a la educación y al cuidado en la primera infancia: perspectivas desde América Latina y el Caribe

La investigación revela que, pese a que las Leyes Generales de Educación en la región reconocen la educación como un derecho humano y el Estado como garante de su pleno ejercicio desde la primera infancia, con distintos puntos de partidas, persiste una fragmentación y dispersión de las políticas y prácticas para esta etapa educativa, así como la ausencia de un financiamiento adecuado. 

>> Para saber más, descarga aquí la publicación.


Foto: Campanha Nacional pelo Direito à Educação

ONU denuncia gobierno brasileño por irresponsabilidad durante la pandemia COVID-19

5 de mayo de 2020

En comunicado reciente, relatoras/es de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) denunciaron el gobierno brasileño por realizar “políticas irresponsables” durante la pandemia COVID-19. Para las autoridades, el país debería abandonar inmediatamente políticas de austeridad económica mal orientadas, que ponen en riesgo a las vidas. Recomiendan también que el Estado aumente los gastos en el combate a la desigualdad y la pobreza que se vienen profundizando con la pandemia. 

La nota fue divulgada después que organizaciones brasileñas denunciaron a la ONU la postura del presidente brasileño Jair Bolsonaro, quien ha ignorado las recomendaciones de cuidado con la vida y la salud de las poblaciones, emitidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

“Los recortes de financiamiento gubernamentales violaron los parámetros internacionales de derechos humanos, incluso en educación, vivienda, alimentación, agua y saneamiento e igualdad de género”, afirmaron relatoras/es especiales de la ONU en el comunicado conjunto. Firmaron la declaración: Léo Heller, relator sobre el derecho humano al agua potable y saneamiento; Hilal Elver, relator sobre el derecho a la alimentación; Leilani Farha, relatora sobre el derecho a la vivienda adecuada; Dainius Pūras, relator sobre el derecho a la salud física y mental; Koumbou Boly Barry, relatora sobre el derecho a la educación; y el Grupo de Trabajo sobre discriminación contra las mujeres y niñas.

La noticia fue publicada por el periodista brasileño Jamil Chade en su columna. De acuerdo al comunicador, esta es la declaración más dura ya presentada por relatoras/es de la ONU contra Brasil, debido a su gestión de la crisis. Así mismo, es de las raras comunicaciones de la Organización dirigidas a un país específico, por su gestión sanitaria.

Para las y los relatoras/es de la ONU, el sistema de salud de Brasil está debilitado y con sobrecarga, lo que pone en riesgo a los derechos a la vida y la salud de millones de brasileñas y brasileños. “Es hora de revocar la Enmienda Constitucional 95 y otras medidas de austeridad contrarias al derecho internacional de los derechos humanos”, afirmaron. Las autoridades denuncian el hecho de que el gobierno brasileño ha priorizado la economía sobre la vida de las personas. “En el 2018, pedimos a Brasil que reconsiderase su programa de austeridad económica y pusiera a los derechos humanos en el centro de sus políticas económicas”, afirmaron. “También expresamos preocupaciones específicas sobre los más vulnerables, particularmente mujeres, niñas y niños que viven en situación de pobreza, afrodescendientes, poblaciones rurales y personas que habitan viviendas informales”, señalaron también.


Enmienda Constitucional 95 y el COVID-19 

Al lado de otras medidas económicas regresivas llevadas a cabo por el gobierno del ex presidente de Brasil, Michel Temer, la Enmienda Constitucional 95 (EC 95) de 2016 estableció un nuevo régimen tributario y determinó que las inversiones públicas en los campos sociales no pueden superar el ajuste por la inflación, durante el período de 20 años. Así, por dos décadas, educación, salud y protección social no recibirán nuevos recursos. 

La Campaña Nacional por el Derecho a la Educación de Brasil y otras entidades y movimientos sociales del país rechazan vehementemente la medida. Al inicio de la crisis sanitaria debido a la pandemia COVID-19, presentaron una demanda ante el Supremo Tribunal Federal (STF), corte máxima del país, por la suspensión inmediata de la EC 95.

La motivación tiene carácter emergencial, ya que la pandemia pone en riesgo al funcionamiento del Sistema Único de Salud (SUS). Así mismo, la suspensión de las clases presenciales en el sistema público de educación, como forma de mitigar la transmisión del virus, acompañada de la interrupción de la oferta de alimentación escolar, ha expuesto niños, niñas y adolescentes de familias con menos ingresos a la miseria y al hambre.


[caption id= Guadalupe Ramos Ponce, en el centro de la foto, durante marcha feminista. Según ella, el cierre masivo de colegios afecta principalmente a las mujeres que tienen la responsabilidad del cuidado de las niñas y niños. “Foto: Eva Da Porta[/caption] “La preocupación por la pandemia del COVID-19 y los desafíos en el tema de salud vienen acompañados de otros tipos de desafíos que impactan de manera directa la vida de las mujeres”, afirma Guadalupe Ramos Ponce, abogada, feminista y coordinadora del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de las Mujeres (CLADEM) en Jalisco (México). Según la entrevistada, la violencia y el desempleo son algunas de las consecuencias de la crisis para las mujeres.  En este diálogo, también se trató sobre la importancia de garantizar el derecho a la educación, sin el cual los impactos negativos para las niñas, jóvenes y mujeres podrán ser más fuertes. “La salida temporal del sistema educativo para las niñas y jóvenes puede implicar al abandono definitivo [de los estudios], y eventualmente derivar en el aumento del matrimonio infantil forzado y el incremento del embarazo en niñas y jóvenes, afectando profundamente la continuidad de su proyecto de vida”. Lee la entrevista completa:

¿Cuáles son los impactos de la actual pandemia para las niñas y mujeres, especialmente en lo que toca a sus derechos humanos, como educación, salud, trabajo, protección social y otros?

Guadalupe Ramos - Esta crisis pandémica muestra las desigualdades y violencias estructurales, en especial sobre las mujeres y las poblaciones en situación de riesgo y vulnerabilidad en América Latina y el Caribe. Es preocupante que en varios países se hayan decretado estados de emergencia o excepción democrática, otorgando poderes especiales a los gobiernos, que pueden así vulnerar los derechos humanos y pueden tener un poder especial sobre la población en general y las mujeres en particular, especialmente en los siguientes derechos que señala la Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe.
“La salida temporal del sistema educativo para las niñas y jóvenes puede implicar al abandono definitivo [de los estudios], y eventualmente derivar en el aumento del matrimonio infantil forzado y el incremento del embarazo en niñas y jóvenes, afectando profundamente la continuidad de su proyecto de vida”
Primero, en cuanto a la salud sexual y reproductiva, debe haber especial atención, con la prevención de la mortalidad materna, el acceso universal a métodos anticonceptivos modernos, servicios de aborto legal y seguro, tratamiento de enfermedades de transmisión sexual, incluídos los antiretrovirales, ya de por sí son desatendidos en los sistemas de salud de la región, antes de la aparición de la pandemia.  En relación con el derecho a la educación, la red advierte que la salida temporal del sistema educativo para las niñas y jóvenes puede implicar al abandono definitivo [de los estudios], y eventualmente derivar en el aumento de matrimonio infantil forzado y el incremento del embarazo en niñas y jóvenes, afectando profundamente la continuidad de su proyecto de vida. Adicionalmente, en diversos contextos, los espacios educativos resultan ser el único lugar seguro para las niñas y niños.  La Red señala también que la crisis de salud representa para las mujeres una sobre-exigencia invisible, que implica mantenerse informada, proveer el cuidado, cumplir con sus deberes laborales, ayudar con las tareas educativas de sus hijas e hijos, la obligada autocontención, la imposibilidad de parar o tener un espacio para el descanso, entre otras cargas históricamente asociadas a los roles preestablecidos entre mujeres y hombres.  Lo anterior se ve agravado por la situación de aislamiento, ya que las mujeres en general tienden a la interacción social y los vínculos con las otras personas. En este sentido, el incremento de las violencias contra las niñas y las mujeres se magnifican con las medidas de aislamiento que ponen en riesgo la vida y la salud de las mujeres y las niñas, reafirmando que los espacios íntimos pueden llegar a ser los más inseguros. Las situaciones de violencia estructurales se agudizan en el aislamiento, incrementando la violencia física, sexual, psicológica, y por lo tanto, el feminicidio.

¿Cómo los movimientos feministas se están organizando para contribuir con la superación de esta crisis, desde una perspectiva de igualdad de género?

Guadalupe Ramos - Las redes feministas en América Latina y el Caribe, como CLADEM y otras más, se han posicionado en torno al tema de la pandemia COVID-19 y la manera como esta crisis en salud está afectando especialmente a las mujeres. Ha sido de vital importancia poner en la discusión dos temas fundamentales. El primero es la violencia contra las mujeres y cómo afectan estas medidas y el aislamiento social en el incremento de estas violencias y los feminicidios.  Como bien lo señala la secretaría de gobernación en México, durante la implementación de la cuarentena, se ha incrementado en 30% el número de llamadas de auxilio por violencia doméstica, por lo que se deben establecer protocolos y actuación inmediata para salvaguardar la vida de niñas y mujeres durante el aislamiento social que las obliga a permanecer bajo el mismo techo de sus agresores.
La preocupación por la pandemia COVID-19 y los desafíos en el tema de salud vienen acompañados de otros tipos de desafíos que impactan de manera directa la vida de las mujeres
El segundo tema es respecto a las medidas económicas que se han tomado y no se han realizado con perspectiva de género. Por tanto, no han atendido las desigualdades estructurales que se viven en América Latina y el Caribe. Como bien lo señala ONU Mujeres, la reducción de la actividad económica afecta en primera instancia a las trabajadoras informales, que pierden su sustento de vida de forma casi inmediata, sin ninguna red [de apoyo] o posibilidad de sustituir el ingreso diario en general. En América Latina y el Caribe, son 126 millones de mujeres que dependen de su trabajo informal. La recesión económica como consecuencia de la crisis del coronavirus hará más difícil que estas mujeres consigan un empleo, y los gobiernos no han tomado las medidas necesarias para atender los efectos económicos de la pandemia con perspectiva de género. La preocupación por la pandemia COVID-19 y los desafíos en el tema de salud vienen acompañados de otros tipos de desafíos que impactan de manera directa la vida de las mujeres.  En estos días de reclusión en casa, las compañeras de CLADEM han hecho una reflexión profunda del significado que está tomando la pandemia en cada uno de nuestros países, y la manera con la que cada gobierno ha afrontado la misma. Una de las conclusiones que se abordaron es que las soluciones no tienen perspectiva de género y no se encuentra diferenciado el impacto que tiene una pandemia de esta naturaleza en la vida y el cuerpo de las mujeres. La compañera Liyana Pavón, de República Dominicana, realizó los siguientes análisis sobre los desafíos de género que se están exacerbando con el COVID-19. Primero, el cierre masivo de colegios afecta principalmente a las mujeres que tienen la responsabilidad del cuidado de las niñas y niños.  En segundo lugar, los servicios fuertemente feminizados como las niñeras, empleadas domésticas, peluqueras, entre otras, son las más afectadas, ya que no pueden hacer su trabajo a distancia. En tercer lugar, el área de salud está conformada en su mayoría por mujeres, el 70% a nivel global, quienes están en la primera línea de lucha contra el COVID-19. En cuarto lugar, la mayor parte de las labores del cuidado remunerado y no remunerado de personas adultas mayores es realizada por mujeres, por lo que están en mayor riesgo de enfermarse y de tener sus propios trabajos no remunerados.  En quinto lugar, encontramos también que las mujeres presentan mayor informalidad laboral que los hombres, y en estas condiciones carecen de protección social, lo que las lleva a situarse en el riesgo y la vulnerabilidad. En sexto lugar, las mujeres víctimas de violencia doméstica están aisladas y encerradas con sus perpetradores, lo que aumenta los riesgos de agresiones y feminicidio. En otros ámbitos, también encontramos que otras redes se han pronunciado, como la Red Feminista G10 X Jalisco, también reflexiona sobre esta situación y hace un llamado al gobierno del Estado, al empresariado, a quienes ejercen posiciones de liderazgo y a quienes tienen posibilidad de brindar apoyo, para que sean solidarios con quienes por cuestiones de desigualdad estructural y vivir en condiciones precarizadas no pueden estar en  cuarentena al no contar con reservas o ahorros que les permitan dejar de trabajar porque viven con el dinero del día. Especialmente con las mujeres, quienes realizan una jornada triple de trabajo en términos de cuidados no remunerados en comparación con los hombres.  Señala también que el nivel de ocupación informal de las mujeres es superior al de los hombres, en todo el México representando un 50%. Particularmente en Jalisco, un 52% de las mujeres que producen lo hacen en el sector informal, por lo que no cuentan con ingresos fijos y no tienen acceso a prestaciones laborales de seguridad social ni a servicios médicos para ellas y sus familias. La red destaca también que, en tiempos de crisis y recesión económica derivadas de estereotipos de género, son precisamente las mujeres quienes sufren el mayor número de despidos, sin considerar que esos trabajos son precisamente la única forma de ingresos en hogares monoparentales.  

¿Qué medidas se demandan de los Estados y la comunidad internacional para proteger y asegurar los derechos de las niñas y mujeres en el actual contexto, en el ámbito educativo y más allá?

Guadalupe Ramos - En el contexto actual, es necesario que en cualquier medida que se tome por parte de los Estados se asegure y garantice la protección de los derechos humanos en general de la población, y particularmente de las niñas y mujeres para que accedan a una vida libre de violencias y se garantice el derecho a la salud, no como un derecho enunciativo, sino de manera integral. Esto incluye la salud sexual y la salud reproductiva y garantizar especialmente el derecho a la educación para niñas, niños y jóvenes que se ven afectadas/os al no existir plataformas educativas que atiendan a las desigualdades estructurales de la región. Es decir, la respuesta de los Estados al confinamiento de las niñas, niños y jóvenes en edad escolar ha sido la promoción de la educación por tecnologías, que en muchas ocasiones están fuera del alcance de la mayoría de la población.
Los Estados deben hacer su máximo esfuerzo para velar por el acceso universal y sin discriminación a la educación de los niños, niñas, adolescentes y adultas/os
UNICEF y UNESCO señalan que el impacto de esta emergencia sanitaria puede ser aún más grave si la educación se detiene. Señalan que los Estados deben hacer su máximo esfuerzo para velar por el acceso universal y sin discriminación a la educación de los niños, niñas, adolescentes y adultas/os que estudian, tal como lo establecen los instrumentos internacionales de derechos humanos.  Es fundamental atender a las recomendaciones de UNICEF y UNESCO, que señalan: Primero, es necesario que docentes tengan contacto regular con las y los estudiantes y sus familias de manera remota, con el fin de favorecer la cohesión social, prevenir la violencia intrafamiliar y asegurar la continuidad del aprendizaje.  Segundo, instan a los tomadores y tomadoras de decisiones de las distintas funciones del Estado a incrementar la conectividad y el acceso a la comunicación de docentes para que puedan continuar con su labor. Tercero, instan a emplear medidas que incentiven a los medios de comunicación públicos comunitarios y locales a difundir contenido educativo de calidad, bajo los principios de la educación en emergencias.
“Es importante que en la emergencia actual nos involucremos todas las personas en los procesos educativos – las familias, maestras, maestros, empresas y la sociedad en su conjunto – para sumar de forma activa a los esfuerzos y para que la educación en esta emergencia no se suspenda, sino que por el contrario, se consolide desde una acción comunitaria”
Cuarto, las y los docentes constituyen un apoyo fundamental para las familias en momentos de emergencia. A través de tales profesionales, no solo se garantiza el derecho a la educación de las niñas, niños y jóvenes, sino que las familias pueden recibir consejos concretos y sencillos sobre actividades que ayudan a bajar los niveles de estrés, angustia y violencia. Por ello, es crucial mantener su estabilidad laboral y brindarles las herramientas necesarias para llevar a cabo su trabajo. Quinto, UNICEF y UNESCO apoyan a los Ministerios de Educación para adaptar la educación al contexto actual a través de plataformas virtuales, contenido educativo para televisión, radio, redes sociales, y a su vez con el acompañamiento pedagógico y psicosocial a través de llamadas telefónicas semanales a las familias.  Es importante que en la emergencia actual nos involucremos todas las personas en los procesos educativos – las familias, maestras, maestros, empresas y la sociedad en su conjunto – para sumar de forma activa a los esfuerzos y para que la educación en esta emergencia no se suspenda, sino que por el contrario, se consolide desde una acción comunitaria.

¿El contexto de pandemia agrava los riesgos de que mujeres y niñas sufran discriminación y violencia?¿Por qué eso ocurre y cómo enfrentar la situación?

Guadalupe Ramos - Sin duda, uno de los mayores desafíos a que nos hemos enfrentado con la pandemia es el incremento de los actos de discriminación, primero para con las personas que padecen el COVID-19. Por increíble que parezca, el propio personal médico, particularmente el personal de enfermería, en su mayoría mujeres, ha padecido actos de discriminación y violencia, al considerarlas posibles focos de infección.  La ignorancia camina de la mano con la discriminación y, sin duda, debe sancionarse. Pero, también se advierte sobre la discriminación en las medidas tomadas por los gobiernos respecto al llamado aislamiento social, a través de un discurso que hace responsable a la gente por enfermarse y morir, por no tomar las medidas de aislamiento y quedarse en casa. Es como si se contagiaran porque quieren, cuando en realidad es gente que vive con ingresos diários y no se han implementado medidas de precaución y atención económica para su sobrevivencia. 
“El coronavirus puede ser desastroso para las víctimas de violencia doméstica. Para muchas personas, el mundo externo puede ser mucho más seguro que su propia casa”
América Latina y el Caribe tienen desigualdades estructurales que implican que muchas personas tengan que salir de casa porque viven prácticamente al día con trabajos informales, y no pueden por tanto acatar la medida de la sana distancia o de “yo me quedo en casa”. Esas medidas, aunque buenas, terminan siendo un privilegio de clase. ¿Los gobiernos tienen plan de contingencia para estas personas? ¿Se saben cuántas jefas de familia tendrán que dejar a sus hijas e hijos solas/os en casa mientras salen forzosamente a trabajar? ¿Cuál es el plan de contingencia para  América Latina y el Caribe tienen desigualdades estructurales que implican que muchas personas tengan que salir de casa porque viven prácticamente al día con trabajos informales, y no pueden por tanto acatar la medida de la sana distancia o de “yo me quedo en casa”. Esas medidas, aunque buenas, terminan siendo un privilegio de clase. ¿Los gobiernos tienen plan de contingencia para estas personas? ¿Se saben cuántas jefas de familia tendrán que dejar a sus hijas e hijos solas/os en casa mientras salen forzosamente a trabajar? ¿Cuál es el plan de contingencia para atender las violencias de género que se suscitaron en casa, con el encierro de la cuarentena?  El coronavirus puede ser desastroso para las víctimas de violencia doméstica. Para muchas personas, el mundo externo puede ser mucho más seguro que su propia casa. Cuando una pareja violenta no puede salir y se encuentra en frustración, las probabilidades de que se ejerza violencia aumentan, por lo que es importante que los Estados establezcan protocolos, albergues y medidas de actuación inmediata para atender los casos de discriminación y violencia contra toda la población, especialmente contra las niñas y mujeres.  También, por supuesto, se deben atender las poblaciones en situación de vulnerabilidad, especialmente la población migrante, personas en situación de calle, trabajadoras sexuales, mujeres trans y todo el abanico de personas que habitan permanentemente las calles. Se hace necesaria la implementación de políticas públicas de impacto diferenciado, y con un control ciudadano a través de medios digitales para prevenir y alertar sobre eventuales vulneraciones a los derechos humanos.      ">
En entrevista a la CLADE, Guadalupe Ramos Ponce, abogada y feminista, analiza el impacto del aislamiento social en el actual momento de pandemia del COVID-19 sobre las niñas, jóvenes y mujeres, y aborda la importancia de la educación en este contexto

“En diversos contextos, los espacios educativos son el único lugar seguro para las niñas y niños”

15 de abril de 2020
Guadalupe Ramos Ponce, en el centro de la foto, durante marcha feminista. Según ella, el cierre masivo de colegios afecta principalmente a las mujeres que tienen la responsabilidad del cuidado de las niñas y niños. “Foto: Eva Da Porta

“La preocupación por la pandemia del COVID-19 y los desafíos en el tema de salud vienen acompañados de otros tipos de desafíos que impactan de manera directa la vida de las mujeres”, afirma Guadalupe Ramos Ponce, abogada, feminista y coordinadora del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de las Mujeres (CLADEM) en Jalisco (México). Según la entrevistada, la violencia y el desempleo son algunas de las consecuencias de la crisis para las mujeres. 

En este diálogo, también se trató sobre la importancia de garantizar el derecho a la educación, sin el cual los impactos negativos para las niñas, jóvenes y mujeres podrán ser más fuertes. “La salida temporal del sistema educativo para las niñas y jóvenes puede implicar al abandono definitivo [de los estudios], y eventualmente derivar en el aumento del matrimonio infantil forzado y el incremento del embarazo en niñas y jóvenes, afectando profundamente la continuidad de su proyecto de vida”.

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Foto: Pixabay

Ecuador: Contrato Social insta a fortalecer la unidad y la solidaridad para superar la pandemia

6 de abril de 2020

El Contrato Social por la Educación (CSE), coalición de la sociedad civil miembro de la Campaña Latinoamericana por el Derecho a la Educación (CLADE) en Ecuador, publicó un comunicado frente al grave contexto que vive el país debido a la pandemia COVID-19.  (más…)


Foto: Archivo Susy Shock - Facebook

Susy Shock: “Tenemos que pensar en una institución educativa que no sea heterosexual”

31 de marzo de 2020

“Y en eso andamos ahora que largamos la sentencia pensándolo todo, dando la vuelta a todo, quizás hasta nos desentendiendo de todo. No queremos ser más esta humanidad”, dice la artista y activista Susy Shock al inicio de la declamación de su poema, en el Facebook, a propósito del Día Internacional de la Visibilidad Trans, celebrado hoy (31 de marzo). (más…)