“Los estudiantes somos protagonistas de nuestra educación” fue el lema de la I Cumbre de Estudiantes Secundaristas de Bolivia, que reunió a 80 adolescentes y jóvenes provenientes de ocho departamentos bolivianos en Sucre, sur del país, entre 29 y 30 de noviembre.
Organizada por grupos y movimientos secundaristas de Bolivia, el encuentro centró los debates en las demandas pedagógicas desde la mirada juvenil, así como la incidencia en la sociedad desde una perspectiva no adultocéntrica.
La joven representante de la Confederación de estudiantes secundaristas, Grecia Yapu Yapur, una de las organizadoras del evento, subraya tres aspectos de esta Cumbre:los aprendizajes organizativos, es decir lo que implicó la convocatoria de un evento a nivel nacional, el diagnóstico sobre las condiciones diversas del estudiantado y la construcción colectiva de aportes y acciones propositivas para la transformación educativa.
“Aprendimos a organizar desde la planificación hasta la culminación. Fue algo muy enriquecedor para las organización, ya que es la primera vez que se hace un encuentro tan grande de y para estudiantes (…). Si bien vivimos en un mismo país, vivimos diferentes realidades diferentes contextos (…). [Durante ese proceso surgieron] propuestas de cómo podríamos mejorar la situación. Saber que todas ellas son enriquecedoras y vinieron de adolescentes y jóvenes estudiantes fue muy gratificante” afirmó la representante estudiantil en este balance una vez culminada la Cumbre.
Aportes desde el estudiantado para las políticas públicas juveniles
La Cumbre contó con el apoyo de UNICEF e iniciativas locales. En esta Cumbre, como invitado internacional participó Paulocesar Santos, joven economista, e integrante de La Educación Se Respeta, una organización de jóvenes activistas que monitorean políticas públicas en Perú, ha sido vicepresidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, representante nacional en el Parlamento de Jóvenes y fundador del Movimiento Estudiantil Latinoamericano y Caribeño (MELAC).
Paulocesar explica que conoció la experiencia del proceso de participación estudiantil y su estructuración, en la cual las representaciones estudiantiles de cada colegio se suman a una federación departamental, haciendo un total de ocho y éstas a su vez conforman la Confederación Nacional.
La cumbre permitió consolidar los aportes estudiantiles a las políticas de juventud de Bolivia, y dentro de los mayores logros está consolidar el movimiento estudiantil, como señala Paulocesar, “yo creo que se está haciendo bastante bien en Bolivia con el liderazgo desde un movimiento secundarista que tiene presencia en las políticas públicas de su país”. Además se discutieron en las mesas de trabajo aportes para los temas de educación que favorecen el diálogo con el ministerio de educación.
El teatro como expresión educativa durante la Cumbre
La intervención del estudiantado durante la Cumbre fue muy diversa, contó con mesas de trabajo, exposiciones, trabajos grupales, entre otros. La valoración de las personas desde un enfoque de derechos humanos se expresó a través de una obra de teatro que presenta la diversidad sociocomunitaria.
La Cumbre como espacio de diálogo estudiantil
Grecia Alexandra Yapu Yapur, estudiante secundarista, representante de la Confederación de Estudiantes de Secundaria, e integrante del Grupo de Trabajo de jóvenes de la CLADE, conversó con la CLADE semanas antes de la realización del evento y opinó sobre la Cumbre “va a ser más jovial, es decir, no va a ser tanto de estar sentados unas ocho horas, siendo una muy activa (…) de una forma divertida y diversa se pueden dar a conocer las ideas y también las propuestas para mejorar la pedagogía”. Subrayó la importancia de crear espacios en donde el movimiento estudiantil sugiera mejoras en las formas de aprender que se desarrollan en los ámbitos escolares.
También comentó que la confederación estudiantil ha sufrido cambios en los últimos siete años. Actualmente se prioriza la participación juvenil, la representación directa y las voces estudiantiles desde el nivel secundario, procurando ampliar los diálogos intergeneracionales.
Grecia Yapur: “La pandemia fue un momento revelador”
La representante estudiantil llama la atención de cómo la pandemia hizo coincidir a muchos y muchas jóvenes, ya que compartieron momentos de frustración al necesitar mayor voluntad para asistir a clases, afirma que la pandemia “no permitió desarrollar sus habilidades sociales con otras personas” al mismo tiempo que “le dio la oportunidad de conocer a más jóvenes líderes y lideresas”, así como profundizar en el autoconocimiento de sus habilidades.
La post pandemia es un tiempo de mayor exigencia para la juventud, en palabras de Grecia Yapur, “para la edad en la que estás, te exige [a las y los jóvenes] más de lo que sabes, tanto para el colegio, para la escuela y la universidad, entonces trabajamos un poquito más que anteriores generaciones para aprender, o en caso contrario se dosifican nuestros contenidos para que sea más entendible, pero aprendemos un poco menos”. En contraparte afirma que se han fortalecido conocimientos en los ámbitos tecnológicos.
Impresiones de la XII Asamblea de la CLADE
La XII Asamblea de la CLADE desarrollada en Tegucigalpa, Honduras, contó con la participación de varias representaciones estudiantiles y juveniles, entre ellas por Bolivia, con Grecia Alexandra Yapu Yapur, siendo su primera vez en un espacio de la CLADE. Ella conoció a la CLADE gracias a la Campaña Boliviana por el Derecho a la Educación, destaca su impresión por la “reunión de varias organizaciones y países, que mantienen comunicación permanente y participación”, tanto en los eventos virtuales como en la presencialidad.
La representante estudiantil aprecia la capacidad de luchas diversas y resistencias que se desarrollan en los países agrupadas en la CLADE, siendo una inspiración para las demás experiencias. Igualmente estima las especializaciones de las personas que integran la campaña regional con diferentes énfasis, en convergencia con el derecho a la educación, lo cual enriquece los debates y profundiza las acciones estratégicas comunes.
Valora la diversidad de CLADE, “porque vi personas de todas formas, colores y con pensamientos muy diferentes, aprendí demasiado, aunque fue un poco pesado para mí el ambiente. Las resoluciones que salieron se me hacen muy interesantes (…) todas las organizaciones tienen un proyecto en común que aplica en toda Latinoamérica, Caribe y el mundo”.
Grecia sugiere profundizar espacios de consulta a las juventudes y estudiantes, para potencializar una pluralidad de visiones que faciliten la comprensión desde el intercambio de multiplicidad de experiencias y aprendizajes.
La educación que la juventud quiere y necesita
Calidad y calidez, son las principales demandas que señala Grecia Yapur, de las juventudes que han compartido reflexiones del movimiento estudiantil en Bolivia. Calidad, donde “todo lo que te enseñen sea de la forma sobre cómo aprender a aprender, y que en serio lo entiendas”.
El tratamiento como alumnado es limitado, en tanto subraya “no tener luz”, para la representante estudiantil es indispensable la calidez, relevar la interacción humana y no robótica, “una educación personalizada en la cual de cada persona resalte sus mayores cualidades y así se potencian (…) una sociedad en la cual seamos personas sentipensantes, que piensen y sientan a la vez”, afirma Grecia.