Falta de docentes, infraestructura precaria y dominio del sector privado están entre los temas del alerta. El organismo de Naciones Unidas exhorta al Estado a establecer un marco regulador de la educación privada, aumentar el presupuesto educativo y eliminar la discriminación y violencia de género.
El Comité de los Derechos del Niño (CDN) de las Naciones Unidas ha publicado el pasado 29 de Enero sus conclusiones relativas al examen del informe del Estado de Haití realizado en el inicio de este 2016. Este examen se centra en el análisis de la situación de los derechos de los niños y niñas y expresa recomendaciones dirigidas al Estado en forma de “observaciones finales”.
En este caso, el Comité reconoce las medidas adoptadas y los esfuerzos realizados en el marco de las políticas educativas por el Estado de Haití, pero señala que aún siguen siendo insuficientes y expresa su profunda preocupación porque “un número significativo de niños y niñas no tiene acceso a la educación”.
El Comité destaca su preocupación relativa a la discriminación y violencia de género en el ámbito educativo. En tal sentido señala que sigue habiendo disparidades en el acceso a la educación entre niños y niñas, en particular, entre las zonas rurales y urbanas, y que las adolescentes embarazadas, madres jóvenes y las víctimas de violación, con frecuencia se ven presionadas a abandonar la escuela.
También observa con preocupación que la infraestructura educativa es deficiente, las escuelas están mal equipadas, sobre todo en las zonas rurales y remotas, faltan maestros/as cualificados/os y que los salarios no se pagan con regularidad.
Otro de los aspectos que resalta el CDN como motivo de gran preocupación, es que el sector de la educación está dominado por escuelas privadas, las que a menudo no están autorizadas ni supervisadas oficialmente e imponen altos costos que agravan la discriminación estructural existente en el acceso a la educación, afectado particularmente a niños y niñas que viven en situación de pobreza.
“La educación siendo un derecho humano fundamental, no debe ser un privilegio. Todo el mundo debe tener acceso a ella. La educación nos ayuda a construirnos como ser humano y favorece el ejercicio de todos los otros derechos humanos”, afirma William Thelusmond, coordinador general de la Reagrupación por la Educación para Todos y Todas (REPT), coalición miembro de la CLADE en Haití.
Responsabilidad del Estado – El Comité recuerda al Estado su responsabilidad de asegurar y regular la educación e insta a facilitar el acceso a la educación primaria gratuita, y a adoptar todas las medidas necesarias para garantizar el acceso a la educación de los niños y las niñas en situación de vulnerabilidad. También recomienda incrementar el presupuesto destinado a la educación, la recuperación de la infraestructura del sistema educativo, incluyendo la construcción de nuevas escuelas, asegurando que los centros educativos estén debidamente equipados; así como asegurar la capacitación de maestros/as y salarios adecuados que se paguen en tiempo y forma.
Establecer un marco regulador y hacer un seguimiento periódico de los proveedores de educación privados, a fin de garantizar el cumplimiento de estándares de calidad, la rendición de cuentas y disuadir que se involucren con fines de lucro, es otra de las importantes recomendaciones planteadas.
Asimismo, se presentaron recomendaciones en cuanto a asegurar que las asociaciones público-privadas no obstaculicen el acceso a una educación de calidad para todos/as los/as niños y niñas, y a garantizar que no primen los intereses privados o que se imponga cualquier forma de comercialización de la educación.
El Comité de los Derechos del Niño (CDN) está integrado por 18 expertas y expertos independientes internacionales, que supervisan la aplicación de la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada hasta la fecha por 196 Estados.
Consulte aquí el informe completo.